El norte de Perú entre costa y sierra
Cajamarca
(Cajamarca)
Miguel: Hicimos un largo trayecto para ir a
la sierra en Cajamarca. Salimos tranquilos y llenos de la mejor energía. El
camino se hizo largo pero valió la pena llegar. Nos recibió una familia
maravillosa y motera. La familia V.I.G.O nos llenó de atenciones, narraciones, momentos
significativos y un calor de hogar que hacía falta; sobre todo en un lugar tan
frio.
María: Desde que salimos estuvimos felices de
tan lindas experiencias de los últimos días. En el camino vimos una hermosa
represa justo en el desierto. También el contraste del verde con fondos de
arena. Unos paisajes hermosos. Y claro que; cuando se viaja a clima frío, lo
primero que resalta es la naturaleza.
Pollo: Hace tiempo no teníamos tanta atención
ja,ja,ja, pío,pío, pío. Me pareció que era otro lugar de Latinoamérica. Supimos
desde el mismo instante en que llegamos que una nueva experiencia positiva
estaba por sumarse a las vividas en este recorrido. Pollo por allí, pollo por
allá y me sentía el cetro de atención. Esta vez una hermosa princesa me regaló un casco para proteger mejor mi cabeza
en caso de una caída. Aunque hasta el momento nada nos ha pasado, pero siempre
es bueno contar con algo de protección.
Miguel: Nuestra experiencia empezó con
visitar el mirador y la historia de la ciudad de Cajamarca narrada por la hija
de nuestro anfitrión. Una joven carismática y llena de energía y amor por sus
raíces e historia. A Cajamarca se le conoce como la ciudad del encuentro de dos
mundos; ya que, fue allí donde culminó el reinando del último inca Atahualpa
quien terminó ahorcado por los españoles.
María: También visitamos todas las iglesias y
catatumbas, además de una salida a las afuera para ver las ventanillas de
Otuzco y las aguas termales.
Pollo: Tuvimos tiempo de visitar en Polloc
una iglesia o Santuario Nuestra Señora del Rosario de Polloc y ahí recibí la
bendición como un tercer participante del viaje que María y Miguel emprendieron desde Colombia. Ja, ja, ja, pío,
pío, pío.
Miguel: No podía terminar nuestro viaje por
Cajamarca sin visitar un lugar hermoso llamado Porcón. Es un lugar de siembra y
bendición con variedad de animales entre libres y en cautiverio. Además con el
mejor queso, yogour y una cantidad de productos producidos en esa zona. Después
de cuatro días en casa, abandonamos una familia que nos acogió como tal y de
quien conservaremos la esperanza de volver a ver. Gracias a estos encuentros,
la amistad de las familias moteras nos une más y nos conforta el espíritu para
seguir en ruta.
Camino
a Huamachuco
María: Esta vez salimos sin tener claridad ¿a
dónde dormir y a qué lugar llegar? De lo que estábamos seguros era que no
íbamos a usar hotel y aun así, manteníamos la confianza y adrenalina de una
nueva experiencia. Después de odiar las jibas que atravesaban la carretera y
que se encontraban una tras otra con aviso y sin ello, logramos ver la laguna
Sausacocha y quedamos encantada con ella. En ese momento decidimos parar en el
primer restaurante y comprar un almuerzo cena, además de solicitar que nos
dejasen tirar la carpa. El único detalle es que era sierra y no llevamos bolsa
de dormir. Aun así, después de escuchar un sí sin problemas, armamos carpa y a
las 6:30 ya estábamos dentro. Los minutos empezaron a pasar y un poco más de
dos horas nos llaman a cenar y tomar un café. Sabían que teníamos frío y que no
eran suficiente las prendas que teníamos con nosotros. Después de aceptar la
invitación, nos han hecho pasar a una habitación con cama y verdaderas sábanas
de lana para descansar. Una noche cómoda en el camino a Huamachuco solamente
con el apoyo de extraños y bendición de Dios.
Miguel: Agradecidos por el gesto de una
extraña que nos brindó posada en el camino. Salimos a visitar las ruinas de Marcahamachuco.
Un lugar lleno de evidencias del poder de destrucción del imperio Inca. De este
lugar se dice que es el sitio arqueológico más extenso de la sierra norte del
Perú a una altitud de 3.600 msnm. Está anclado en los Andes de la actual región
de La Libertad.
Pollo: Tuve miedo de que la moto “la hormiga”
no pudiera lograr llevarnos a los tres más morrales hasta esa altura. La
hormiga aguanta todo y nos dejó con la boca cerrada Ja, ja, ja, pío, pío, pío.
Bueno, realmente a mí nadie me cierra la boca. Ya sabía que ella podía.
María: Me pareció que la majestuosidad del
lugar y el significado que tenía para la civilización Huamachuco fueron de gran
relevancia. Aún se conserva evidencia de las torres rectangulares, el castillo,
la plaza principal con lajas de muchos años entre los 350 y 1.100 después de
cristo. Es un lugar al que gracias a que
tiene espacios no abiertos al público por restauración, se puede acceder
gratis.
La
Libertad (Trujillo)
Miguel: Ese mismo día y confiando en los
kilómetros que se marcaban hasta Trujillo, salimos de Huamachuco sin contar que
lo que nos esperaba era un clima frío, desolado, picos de nieve a lo lejos y un
paisaje majestuoso pero no tan fácil ni para nosotros ni para la hormiga. Zonas
con muchas curvas, subidas al nivel de la cordillera y luego descenso. Pensamos
que la gasolina la podíamos comprar en la ruta y resulta que no encontramos puestos
de gasolina por esa zona. Llegamos a un pueblo pasada las 5:00 pm y compramos
un galón de gasolina a un señor que la vendía a 16 soles.
Miguel: prometimos nunca más salir de una
ciudad sin gasolina extra y así, llegamos a Trujillo después de las 8:00pm. La
persona que nos recibió en ese momento estaba esperando a otra pareja de
colombianos que regresan de su viaje por Suramérica. Hablamos de todo y
logramos unirnos a otros grupos de apoyo en la ruta.
Pollo: Nos mata la urgencia de generar
ingresos porque si no voy a terminar mal. Junto a Miguel y María, salimos a
cotizar los imanes ja,ja,ja, pío, pío, pío. Que enredo para comprar los
implementos y más para trabajar en ello. Fueron necesarios 3 días para que se
pudiera obtener el producto y eso nos hizo perder tiempo para conocer otros
lugares de la ciudad que no fuese la oficina de publicidad.
María: Esta vez no quise perder la
oportunidad de visitar alguna ruina o sitio arqueológico.
El lugar visitado fue las Ruinas de Chan- chan una ciudad de adobe que conserva evidencias de plazas, casas y lugares de ceremonia. El costo como estudiante universitario es de 5 soles por persona. Los demás pagan 10 soles. Se tiene acceso a 4 lugares pero por tiempo solo visitamos dos. Chan Chan es Patrimonio Mundial y se encuentra ubicado al margen derecha del valle de Moche; Distrito de Huanchaco. También visitamos Huaca el Dragón o Arco Iris que es un sitio prehispánico Chimú del siglo XII- XV d.c.
El lugar visitado fue las Ruinas de Chan- chan una ciudad de adobe que conserva evidencias de plazas, casas y lugares de ceremonia. El costo como estudiante universitario es de 5 soles por persona. Los demás pagan 10 soles. Se tiene acceso a 4 lugares pero por tiempo solo visitamos dos. Chan Chan es Patrimonio Mundial y se encuentra ubicado al margen derecha del valle de Moche; Distrito de Huanchaco. También visitamos Huaca el Dragón o Arco Iris que es un sitio prehispánico Chimú del siglo XII- XV d.c.
María, pollo y yo: Hemos terminado una nueva
estadía en un lugar de la costa; pero con clima frío, que nos hace replantear la
idea de que por ser costa tendría que ser caliente.
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